SOLIDARIDAD Y POLÍTICA

La foto está tomada del face de Acampadalangreo



La razón de este catártico soliloquio que voy a soltaros hoy reza sobre las plazas de los pueblos, no por su morfología más o menos innovadora sino por lo reventonas que se invistieron de gente no verbigracia de Alejo Stivel y los chicos de “Tequila” tocando un “rock&roll” en el corazón de las mismas y sí por como algunos, padres de la conservación Neoliberal, lejos de la medioambiental se relamían, por una “movida orquestada” contra ZP, aliado de las fuerzas del mal y causa espúrea de la crisis de todas las crisis. Así alababan el movimiento llamando a sus ideólogos, jóvenes comprometidos con la prosperidad de un país, al que esos mismos barones encriptan como España. La historia se tornó parda cuando los cánticos se volvieron anti – sistema depredador y fagocitador de seres humanos.. Y en ésas y por tal, dejaron de ser “Indignados”, concienciados para, por boca de las mismas gargantas, conglomerar una caterva de “perroflautas” indocumentados, como los tildó alguno de los creadores de opinión de la rancia estirpe conservadora nacional, a la derecha de la derecha, en algún medio, o mejor dicho, aparato de su comunicación global.
Para los que somos unos idealistas y soñadores, parecía que nuestra España estaba, al fin, a la cabeza de algo, que podría por una vez dar ejemplo de responsabilidad social al mundo; y todo porque un grupo de ciudadanos se lanzaron a la calle a reivindicar la necesidad de ser escuchados “in tempore” más allá del receptáculo de la sacrosanta urna electoral, cada cuatro años. Al que escribe estas líneas, hay una cosa que le entristece de estos movimientos. Me refiero a que el carácter festivo que se le quiere dar, es utilizado por sus detractores como ejemplo de falta de argumentos estructurados unido a, permítaseme la expresión, un recalcitrante “hipismo” y contubernio con todo tipo de drogas. Lo malo es que, ante tal celada, los organizadores puedan olvidar la esencia de sus reivindicaciones y se parapeten tras los muros de la lucha antisistema, en la calle. Y entonces, amigos míos, tendremos perdida la batalla, una vez más. Creo que alguna vez os hablé del sistema global y de sus organismos internacionales aliados que, cual jinetes del Apocalipsis, campan por los respetos de la especie humana. Pues bien, no hay mejor cosa para afianzar su poder que darle la opción de ejercer el derecho a la violencia de estado – o de imperio – para poder subsistir y salvaguardar el modo de vida presente. Si se siente amenazado, do quiera que sea, solo tiene que enviar a su guardia pretoriana y romper unas cuantas cabezas, de rastas orladas, abrir nuevos agujeros en las cejas para más “piercings” o escarificar a toletazos cualquier parte del cuerpo. Vamos, como rezan las penitencias de los universales religiosos o “que viene el lobo” que monta lo mismo. ¿Y qué hacer, me diréis? ¿Quedarse en casa aguantando el chaparrón? O ¿ir hacia el cadalso, o a la arena del Coliseo, entonando himnos de gloria?. ¡Va a ser que no...!. Enfoco los tiros hacia otro lado, mi propuesta que no es para nada mía ni innovadora, es la de hacer las revoluciones desde dentro, dando batalla en el corazón mismo de las Instituciones y con ello no me refiero a que todos formemos parte de las candidaturas de miles de partidos políticos. De hecho “pa pasar lo que pasa”. La movilización civil, la del tercer sector, va mucho más allá de sentarse en una plaza o jardín de las delicias, de por meses...”¡ye que eso nun val pa na...!”. Si no participamos de la vida del barrio, asociaciones, Cultura...Y no nos formamos, como debemos, - siempre la misma cantinela me diréis – pero es así. Si no lo hacemos, retomo, estamos perdidos, como náufragos en un proceloso mar de la desesperación. La misma historia, mil veces repetida como una mala digestión, de los “galgos y los podencos”, tan re-escuchada que ya no tiene gracia. Y que solo nos deja neuronas “pa” querer saber quién “Xoga mais bonito, el Madrí o el Barca...quién ganará el próximo “gran hermano”... con quién se acuesta y dónde...” En fin, todas las cosas importantes de la vida, como diría el gran Gila, al otro lado del teléfono. El tiempo corre, más rápido que las propuestas de los 155 €, que poco pintan incluso cuando el magnate Soros intentaba torpedear, con su imperio al de la Libra...Porque solo hay en torno al 5% de dinero real que respalde todo el que existe en las economías de cualquier país. Y poca cera más queda de la que arde, princesa. Y la batalla desde dentro, es la única manera de tumbar un Sistema que huele de pura podredumbre, desde fuera y la infraestructura, equivale a breves sarpullidos de verano, el cutis bronceado de la superestructura.

Heri Gutiérrez García.